A
finales de octubre, aprovechando que íbamos a pasar un fin de semana en Jaén,
eché la bicicleta al coche porque tenía ganas de recorrer algunos kilómetros de
la Vía Verde del Aceite.
Así,
un sábado por la mañana, con una temperatura muy agradable y el cielo
completamente azul, salimos Antonio,
Antonio Luis y yo desde las Fuentezuelas;
dirigiéndonos por un carril de tierra prensada hacia el oeste, hacia
Torredelcampo.
Recorrido en Wikilock
Fotos de la Ruta
Mapa orientativo en la salida. Las Fuentezuelas. Jaén.
Kilómetro 0 de la Vía Verde del Aceite. En Jaén.
Una vía ideal para el deporte disfrutando del paisaje.
El camino de vuelta.
Campos de olivos en las cercanías de Jaén.
Estación de Torredelcampo
Área de descanso en la Estación de Torre del Campo
Puente de la Vía Verde del Aceite
Autovía del Olivar.
Puente sobre la autovía
Antonio, Antonio Luis y yo en Martos.
En Martos, junto a la Peña.
Posando para la cámara
Conseguido, ahora volvemos a Jaén
Vía verde del Aceite. Estamos en tierra de olivos.
Historia del Ferrocarril (Página web de Vías Verdes)
http://www.viasverdes.com
El 12 de julio de
1852 se celebró en el Ayuntamiento de Jaén una reunión de contribuyentes para
tratar, por vez primera, la posible consecución para Jaén de una línea
ferroviaria. En el 1859 tuvo lugar otra importante reunión para la construcción
de un ramal que enlazara Jaén con Espeluy y que se uniría a la línea general de
Andalucía. Sin embargo, la idea tardó en hacerse realidad casi dos lustros
después de barajarse distintos proyectos. Así se decidió construir una línea
ferroviaria que partiendo de la general de Andalucía, por Jaén, enlazara con
Puente Genil pasando por Cabra y Lucena. La Ley que la autorizaba se aprobó en
el año 1873.
En 1876 fue aprobado el proyecto presentado por el
malagueño Jorge Loring, comenzando las obras en 1879 a cargo de la flamante
Compañía de Ferrocarriles Andaluces. En julio de 1881 se completó el tramo
entre Espeluy y Jaén hasta que, en 1890, el ingeniero De la Pierre presenta la
modificación del trazado original de la vía, en la cual se proyectan ya las
estaciones de Martos, Vado Jaén, Alcaudete, así como los grandes viaductos de
la línea (Guadajoz, Víboras,...), Las obras se desarrollaron bajo la dirección
de Carlos Alexandre, ingeniero de la Compañía de Ferrocarriles Andaluces,
encargándose al taller de ingenieros-constructores Daydé y Pille, de Creil
(Francia) la construcción de los viaductos metálicos y pontones.
En 1891 se terminó el tramo cordobés comprendido entre
Puente Genil y Cabra y, en 1893, se daban por finalizados los trabajos del
tramo Cabra –Jaén. Quedaba así expedita una línea ferroviaria que salía de
Linares, pasando entre otras estaciones por la de Jaén, Torredelcampo,
Torredonjimeno, Martos, Vado-Jaén, Alcaudete, Luque, Zuheros, Doña Mencía,
Cabra, Lucena y continuando hasta la estación de Campo Real (Córdoba).
Con la línea ferroviaria completa, la Linares-Puente
Genil, uno de los principales tráficos de aquel nuevo ferrocarril fue el
transporte de aceite a granel, embarcado en vagones cisterna. Tal fue el
protagonismo de este transporte que el ferrocarril recibió la denominación
popular de “Tren del Aceite”, nombre que
ha heredado la actual Vía Verde. Pero, además del aceite, las vías de este
ferrocarril también sirvieron para transportar carbones de la cuenca de Belmez,
y plomo y otros metales de los yacimientos linarenses hacia el puerto de
Málaga.
La historia económica de España no fue muy boyante en las
primeras décadas del siglo XX y, en 1936, la línea, junto a todas las que
formaban la amplia red de “Andaluces” fue intervenida por el Estado, al comprobar
que la situación económica era ya insostenible. Durante la Guerra Civil, sin
embargo, la Linares-Puente Genil cobró vida sirviendo de alternativa a la
frecuentemente bombardeada Espeluy-Sevilla. Al terminar la Guerra la línea se
vino abajo, las locomotoras se veían menos por sus vías y a velocidades muy
bajas (30 Km/h).
El 2 de julio de 1969 RENFE hizo público el proyecto
relativo al Estudio Particular de la línea Jaén-Campo Real en el que, dada su
precaria situación, se planteaban algunas propuestas como el cierre del
servicio de viajeros, la supresión del servicio público de mercancías y el
desmantelamiento del tramo comprendido entre Torredonjimeno y Campo Real. La
línea se mantuvo en activo hasta 1985.
La Diputación Provincial de Jaén puso en marcha, diez años
después, un proyecto de recuperación del viejo ferrocarril abandonado como Vía
Verde para la práctica segura del turismo en bicicleta y senderismo por
turistas y visitantes locales, que concluyó con la finalización de las obras de
adecuación del tramo jiennense en 2002 y su inauguración tras las necesarias
obras ejecutadas por el Ministerio de Medio Ambiente. Con posterioridad fue
recuperado también el recorrido cordobés, cuyo tramo final, de Lucena a la
estación de Campo Real fue puesto en servicio como Vía Verde en 2011. Poco
después se sumó la recuperación del ramal de Baena acondicionado por este
Ayuntamiento cordobés. http://www.viasverdes.com